Las mujeres, sometidas a la violencia patriarcal, sufren de manera más descarnada el efecto de las guerras. Las violaciones son comunes en todos los conflictos y no se producen de manera espontánea, sino que son usadas sistemáticamente como parte de la estrategia militar.
La masculinidad es el valor central de lo militar, masculinidad que es entendida como la construcción social basada en la superioridad del sexo masculino. Esto produce un rechazo de lo femenino que se traduce en un día a día (...)