TRASTORNO TRIPOLAR 125. NUEVA ERA TERAPÉUTICA

La adicción a las compras es un impulso que no se puede controlar, un acto poco consciente del que después nos arrepentimos, porque compramos cosas poco útiles o gastamos más de lo que podemos. Cuando la persona se siente triste, deprimida o enfadada, lo único que le calma es ir de compras. Compra con frecuencia cosas poco útiles, de cuya adquisición luego se arrepiente. Suele tener la casa llena de artículos que no usa y que le resulta inservibles. Suele precipitarse a la hora de adquirir porque no puede controlar sus impulsos. Del entorno familiar y de amigos le suelen llegar mensajes críticos por su desmedida afición a comprar. Aun a pesar de haber comprado muchas cosas o haber realizado un gran gasto, se siente insatisfecho cuando reflexiona sobre los objetos adquiridos. Ve que se le va el dinero sin darse cuenta, y a menudo está irritado por haber gastado el dinero imprudentemente. Cuando recibe el extracto de la tarjeta de crédito, se sorprende sobremanera por la cantidad e importe de los gastos que ha hecho y maldice a toda la corte celestial. Pero dentro de esta adicción existe algo bueno, porque el tiempo libre dedicado preferentemente a visitar los centros comerciales se verá amenizado por las bonitas sintonías comerciales de artistas como Zero O’Clock, Los Loud Jets, Cheena, Chickenwolf, Los Pirombodas , Preston Epps, Death Piggy, La Familia Chiflada, Psycho-Surgeons, Janko Nilovic, Mike Rep and the Quotas, Rizan Said, Angel Du$t, Bernard Fevre, y Wganda Kenya.